Secreto de confesión
Cuando vas al
confesionario y dices tus pecados, te oye un hombre. Cuando buscas a
un pastor y le confiesas tus pecados –mostrando tus debilidades- te
expones y vulneras ante él (o ella) en lugar de confesar tus pecados
y faltas antes Dios, quién persona y sana nuestros males internos.
Cuando haces un
censo socioeconómico, del mismo modo, no sólo confiesas lo que
tienes material y económicamente, sino que te vulneras frente a una
nube de testigos que no conoces, que no puedes vigilar ni controlar
y, por el contrario, le das poder –argumentos- para seguir siendo
controlado por quienes política y económicamente te controlan y
vigilan.
En “Somos
Venezuela” manifiestas qué cosas tienes y qué cosas desearías.
Cuando manifiestas que careces de esto o de lo otro, confiesas dónde
está la gota molesta de tu casa, dónde hay la necesidad que hombre
o mujer puede seguir manipulando en beneficio propio (no el tuyo)
y, lo más triste aún, es que esa información ya no se vincula al
número de tu cédula, sino al número y al paquete de datos
biométricos que el comunismo ya tiene a disposición de la Bestia.
Jesucristo dijo:
“el que es bueno en lo poco, es
bueno en lo mucho” (Mat 25:21 ; Luc 19:17) y, si han
sido malos cuando hubo abundancia de ingresos, no serán ahora cuando
ingresa menos dinero por concepto de ventas de petróleo, cuando el
país tiene más gente y bocas que atender, con distintas necesidades
y, desde luego, atenderá primero a los chavistas, como lo hizo con
la lista de Tascón: Yo no recibí empleo por salir votando en contra
de Hugo Rafael y seguiré votando en contra del comunismo.
¿Has visto que
hay ente vendiendo su caja del CLAP? ¿Has oído de la reventa de las
mismas? ¡Yo he visto y oído! Todo se trata de tráfico de
influencias, de manejos en el poder y, si no recibiste cuando había
más ¿Recibirás cuando haya menos? (tienes todo el derecho de hacer
lo que te plazca)
Es bueno
recordar que: “…la palabra de
Dios es viva y
eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta
partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y
discierne los
pensamientos y las intenciones del corazón.”
(Heb 4:12)
Si mi pareja ha
sido infiel, por años, cuando amenazo que voy a dejarla ¿cambiará
ella? ¿Se arrepentirá y se enmendará cuando le digo qué me falta
y qué necesito, materialmente?
Cuando una
persona se ha ocupado sólo de ella por muchos años –demasiados-
sólo cambia por terapia de choque pero, si tú (por el contrario) le
das más información para que se siga beneficiando de tu
posición en desventaja, tus flaquezas y necesidades, sometes tu
voluntad a ella (o a él), rindes lo que te quede de fuerzas al
conocimiento que otorgas al culto o sumisión que le das y, si de era
crees que eres tú quien deba ir al altar a confesarte –hecha tu
confesión de carencias- te dañas a ti mismo, pues, sólo
Dios oye y no se aprovecha de lo que te falte o de aquello en que le
falles.
Si yo digo que
paso hambre y que estoy desempleado, ninguna mujer se acercará a mí
porque le sería una carga económica (y muy pocas mujeres mantienen
a sus maridos). Si alguna mujer decide “hacerse cargo de mi vida”,
debo satisfacerla EN TODO SENTIDO. Ella demandará lealtad
absoluta y, para que tal cosa suceda, esa mujer (lamentablemente)
esa mujer habrá sido un rechazo de otras parejas ¿Usted cree que
una mujer bonita -física y mentalmente atractiva- está dispuesta a
mantener a un hombre que no le sirva ni en la cama ni en el trabajo?
¡Pardiez! ¡Despierte! La analogía aplica a cualquier gobierno de
turno, sea de izquierda o derecha, si usted o yo somos improductivos,
desleales, feos (y hasta malos en la cama) ningún gobierno se
dedicará más a usted que aquellos que le beneficien y le produzcan.
¿Qué mujer floja se busca a un hombre flojo e improductivo? ¿Qué
mujer inepta se une –a mantener- a otro ser inepto?
La analogía
“comparativa” es dura (ofensiva, quizá) pero eso mismo es lo que
busca el comunismo a través de “Somos Venezuela”: Usted le da la
información de sus carencias y –el comunismo- seguirá
trabajando en ellas, explotándolas (en contra suyo).
Solemos olvidar
que Jesús dijo que “el que
persevere, hasta el final, será salvo” () Olvidarmos
que la marca será impuesta en las frentes y manos y, aquellos que no
la lleven “no podrán comprar o vender” () ¿Cuányas veces te
amenazan con quitarte los “beneficios”? ¿Cuántas veces te han
dicho que no podrás recibir el CLAP o cualquier cosa que te haga
falta?
No solamente prueban tu volunad, sino que la debilitan. No sólo te
tientan con aquello que sabes necesitas (comer) sino que –en el
interior de Venezuela- también les dicen: “casa que se haya
construido y no se use, se le dará a otro que la ocupe y la use”
¿Has escuchado eso que ya no es un rumor electoral? Pero es castigo
de Dios, por cuanto de Él nos alejamos todos, dando culto a lo
que nada merece: “Y sus casas
serán traspasadas a otros, sus heredades y también sus mujeres…”
(Jeremías 6:12)
En Las Tejerías
(Edo. Aragua) y Tiara han habido reuniones donde ciertos voceros
vecinales (como Felipe Nieves) han dicho tales cosas y, un día antes
de las elecciones para la ANR (Asamblea Nacional Constituyente) han
convocado a una reunión (¿para manipularlos y
coaccionarlos?) en la cancha de La Esperanza, donde
supuestamente -ese día- entregarán el CLAP pero, ¿es que el
pueblo no les paga 11.300 Bs por esa
caja de comida mexicana? ¿Deben hacer ellos lo mismo, pagarles con
la moneda de las rameras?
“…han
venido a ella como quien viene a mujer ramera…” (Eze
23:44)
No obstante ¡Hay
mujeres más dignas!
“…mi
pueblo es necio, no me conocieron; son
hijos ignorantes y no
son entendidos; sabios
para hacer el mal,
pero hacer el bien no
supieron.” (Jer 4:22)
“…te
menospreciarán tus amantes, buscarán
tu vida.” (Jer 4:30)
¿Estamos en
deuda con aquellos que permiten a los denigrables buhoneros
especuladores? ¿Seguiremos sometidos a esos policías
putrefactos que roban teléfonos, casas -y vidas- siguiendo el mal
juego inmundo de los GN bolivarianos?
El caballo rojo
del comunismo lo trajeron ustedes. El comunismo lo
consolidarán ustedes con sus forzados votos… Eso no es una
maldición que Dios nos haya traído.
Cada día ustedes
leen menos, y no entienden las mentiras de otros labios:
“Y
curan la herida de mi pueblo con liviandad, diciendo:
Paz, paz;
y no hay paz.”
( Jer 6:14)
Es culpa de
ustedes… No sólo es la mía.
“…cada
uno sigue la avaricia; y… todos son engañadores.”
(Jer 6:13)
¡Idólatras!
¡Comunistas!
“He
aquí yo traigo mal sobre este pueblo,… porque no escucharon mis
palabras, y aborrecieron
mi ley”. (Jer 6:19)
¿Cómo puede un
extraño –ajeno a las leyes y mandamientos de Dios- hacer obras de
justicia, si sólo pretenden someter a quienes se les humillen y
vulneren confesando sus necesidades?
“…no
habéis guardado lo establecido acerca de mis
cosas santas, sino
que habéis puesto extranjeros como guardas de las ordenanzas en mi
santuario.” (Eze 44:8) [RV]
“No
se ocuparon de cumplir con mi culto sagrado, sino que pusieron a
extranjeros a cargo de mi santuario.” (Eze 44:8) [NVI]
Dicho en otras
palabras, diste culto a lo profano en lugar de honrar al Dios
Verdadero.
¿Pueden los
santeros, los satanistas o los espiritistas cumplir las leyes y
mandamiento de Dios? ¡Hemos votado por inconversos! Hemos
apostado a que las leyes sean cumplidas por pecadores y ¡más
pecadores que nosotros!
Si tú o yo nos
confesamos ante servidores de satanás, si nuestras flaquezas y
NECESIDADES son confesas ante ellos, sea por palabras o por escritos
en un censo –todo lo que digas o escribas- será puesto delante de
la mesa del enemigo de tu vida y, si aún no comprendes que tu data
biométrica se verificará y confirmará por medios electrónicos (en
una nueva transmisión de datos) no has comprendido las profecías
del Apocalipsis.
“Y
hace que a todos, pequeños y grandes, ricos
y pobres, libres
y esclavos, se les dé
una marca en la mano
derecha o en la frente,
para que nadie pueda
comprar ni vender, sino
el que tenga la marca, la cual es el nombre de la bestia o el
número de su nombre.
Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, que calcule el
número de la bestia, porque el número es el de un hombre, y su
número es 666.” (Apoc. 13:16-18)
En los censos
confiesas qué cosas necesitas, qué te falta, dando poder a quien ya
lo tiene. Te vulneras y te sometiste a un carnet que será tu cédula
de identidad para el voto (¿en la constituyente?) y te pregunto, si
en 18 años no te dieron lo que necesitas ¿te lo darán ahora,
cuando te castigan y controlan con el hambre, con un empleo y otras
cosas que confiesas son tus necesidades?
Yo prefiero
confiarme en Dios. Prefiero llorar en secreto a confesarme ante otro
hombre o mujer y, tanto menos, cuando lo que me falte o desee lo
entregue por escrito -dando lástima, vulnerándome- para hacer la
voluntad del que NO HACE la voluntad de Dios.
“…su
heredad soy yo… Su propiedad soy yo.” (Ezequiel 44:28)
Para gloria de
YAHWEH, por medio de Su ungido Hijo, Yahshua.
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